"¡Hola a todos! Permítanme compartir un poco de mi historia, porque sé que muchos de ustedes comparten mi misma pasión y ritmo de vida. Desde que tengo memoria, el hip hop ha sido la banda sonora constante de mi existencia. Desde los días en que las canciones sonaban en la radio de mi barrio en cassettes y vinilos, las letras y los ritmos se han convertido en la esencia misma de quién soy. El rap siempre ha sido mi refugio musical.
Recuerdo cómo las rimas de mis ídolos fluían a través de mis oídos y se quedaban grabadas en mi mente. Siempre he tenido algo que decir, algo que expresar, y el rap se convirtió en mi voz. Cada vez que tomo el micrófono, siento que puedo liberar todo lo que llevo dentro, ya sean alegrías, luchas o reflexiones profundas sobre la vida en las calles.
Pero, hey, el hip hop no es mi único terreno de juego. Si hay algo que se acerca a la misma energía cruda y auténtica, es el baloncesto. ¿Alguno de ustedes ha sentido esa conexión? Desde el momento en que sos
"¡Hola a todos! Permítanme compartir un poco de mi historia, porque sé que muchos de ustedes comparten mi misma pasión y ritmo de vida. Desde que tengo memoria, el hip hop ha sido la banda sonora constante de mi existencia. Desde los días en que las canciones sonaban en la radio de mi barrio en cassettes y vinilos, las letras y los ritmos se han convertido en la esencia misma de quién soy. El rap siempre ha sido mi refugio musical.
Recuerdo cómo las rimas de mis ídolos fluían a través de mis oídos y se quedaban grabadas en mi mente. Siempre he tenido algo que decir, algo que expresar, y el rap se convirtió en mi voz. Cada vez que tomo el micrófono, siento que puedo liberar todo lo que llevo dentro, ya sean alegrías, luchas o reflexiones profundas sobre la vida en las calles.
Pero, hey, el hip hop no es mi único terreno de juego. Si hay algo que se acerca a la misma energía cruda y auténtica, es el baloncesto. ¿Alguno de ustedes ha sentido esa conexión? Desde el momento en que sos